La biblioteca de Andrómeda. Capítulo 6

Recordó la señorita Edmunda el brillante color de la cerveza. Y estuvo a punto de dejar su trabajo. Pero las arqueólogas de su generación cursaron estudios en ferreas escuelas militares y sabían cómo zafarse de la debilidad. Bueno, quizás no lo sabían, esa es la verdad, pero el hecho cierto es que se zafaban aferrándose a su trabajo. De ese modo se forjó una estirpe de arqueólogas que eran tan eficaces como depresivas. Por todo lo anterior la señorita E. comenzó con la redacción del siguiente informe: Folio 3 del recuento de Cintas de soporte magnético del siglo XX, con breve reseña de sus títulos y contenidos: Cinta Número 7 Título: Vericuetos de la ciencia Tendencia: Cine documental de los 80. ¿Cómo se fabrica un transatlático? ¿ y un picaporte cromado? ¿la goma de borrar de los lápices es tóxica? ¿Es la ciencia la respuesta a todos nuestros desvelos? ¿tienen los animales unicelulares tendencia la meláncolía? Todo ello y mucho más en 35 minutos de película. Primeros y primerísimos planos acompañados de animada música tecno. Cinta Número 8 Título: No me digas que ya es tarde Tendencia: Cine drámatico de los 80. Bajo Aragón, verano. La dueña de un negocio de recambios aeroespaciales descubre que su marido es en realidad un Cyborg. La cinta nos muestra como un ser humano se ve envuelto en un sin fin de circunstancias desconcertantes. Drama, amor, ciclismo y alta tecnología. Cinta Número 9 Título: Manteca de horizonte Tendencia: Cine psicoquinético de los 80. Jonanthan H. tiene un secreto inconfesable. Sabe a ciencia cierta que es su propia abuela materna reencarnada. En su entorno laboral resulta sospechosa su hipersensibilidad a los folios y su compañero de piso comienza a molestarse por su afición a gritar desnudo en la cocina en mitad de la noche con el cuerpo embadurnado en goma arábica. Los acontecimientos se precipitan hasta un límite insospechado. Drama, drama y más drama. Blanco y negro.

GIANT

La pintura de hoy

Este medio día terminé esta pintura. Es mi último cuadro. La fotografía no es muy buena. Es posible que retoque la figura acentuando las luces y sombras, pero aún no lo tengo decidido. También estuve desarrollando un boceto de una figura a partir de esta que mostraré otro día. Espero que os guste.

La danza enloquecida de las mariposas nocturnas

Tengo algunos amigos muy aficionados al cine y no sería extraño que cualquier día reciba un correo electrónico muy parecido a éste: Estimado señor Guillermo del Toro: He cometido el pecado de ver una de sus películas sin pagar por ello. He mirado por una de las rendijas que Internet ofrece . Estoy fascinado con lo que he visto: su film MAMÁ. La historia y el modo en que nos la cuenta es un conjunto perfecto. Me atrajo, como solamente lo han hecho algunos, pocos, libros o películas, de principio a fin. El escenario tenía la luz de las pesadillas, el color que imagino que tienen los cuentos de miedo. Los monstruos, visibles e invisibles, se deslizaban, serpenteaban, magníficamente por las habitaciones. Los personajes parecían personas cuando era necesario. Todos los recursos mágicos del cine danzaban, como las hojas secas cuando el viento del otoño las impulsa a bailar. Si mis medios económicos no aumentan lo suficiente para emplearlos en ver cine, y usted continúa dirigiendo estas cosas estupendas, no puedo prometerle que no vuelva a cometer el pecado de intentar observar, por un hueco, sus nuevas creaciones. Reciba un saludo de un admirador. J.H. Pero claro mis amigos aficionados al cine siempre están muy ocupados con sus fantasías y un mensaje como el que acaban de leer no se ha escrito todavía.

Año nuevo

Los acontecimientos que nos envuelven y que provocamos son los que cambian nuestra vida. Estos días situaciones sobrevenidas y esfuerzos que he realizado en diversos, e importantes ámbitos empiezan a dar sus frutos. Se abre una nueva etapa. La vida es una sucesión de nuevas etapas, al menos en mi caso. Cambios que me conmueven, me perjudican o me favorecen. Ahora estoy más cerca de alguna persona importante, más cerca del trabajo en una cocina, más cerca de iniciar nuevas actividades artísticas y más cerca, en definitiva de mi mismo y de los otros. La vida es más fascinante que cualquier novela. Lo siento por mi admirado orfebre de la palabra, sorry mister Wilde pero es el arte el que imita a la naturaleza, y lo hace torpemente.